Un poema

POESÍA

11/5/20251 min read

Por: Sandra Arenas

(1998, Ciudad de México). Licenciada en Letras y Literaturas Modernas Inglesas por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Colaboradora en el proyecto Poética Sonora MX desde 2022. Actualmente se desempeña como Asistente Legal, llevando casos de migración a los Estados Unidos. Fue becada de la novena generación del taller de composición de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM). Sus poemas y cuentos han sido publicados en medios digitales e impresos tales como la Red Universitaria de Mujeres Escritoras (RUME), Universo de Letras UNAM, la revista Ágora del Colegio de México, la antología impresa Boundless 2024 y Boundless 2025, y Diversidad Literaria. Formó parte del festival internacional de escritoras Primavera Bonita 2025.

Leí que la soledad quema

porque no comparte su calor,

es como un sol personal

que no alumbra, sino que envuelve

erosionando las capas externas

dejando al descubierto

lo que quiero mantener invisible

Es silencio forzado e impenetrable

una casa embrujada llena de vacío

alguien tocando a la puerta

esperando eternamente una respuesta

Es el abandono planeado

sin querer estar,

compartir ausencia y hacer tangible

el espacio, los cuartos en los que se dividen los adioses

Compartir hogar con la soledad

es como aguardar la noche

sin darse cuenta que ha llegado,

es como salir del cuerpo y habitar

lo marchito del tiempo

Un florero viejo

una mano estirada

el añoro de sostener

algo más que el aire sin formar

Es tan fría la soledad

que abrasa

es un volcán que se come ciudades

dejando inhabitable mi pecho

es una habitación sin puerta,

solo con ventanas que dan hacia lo que falta

Cómo pesa lo que falta

porque no restringe, no limita, no acorta

no es.